COLESTEROL ALTO, ¿CÓMO PODEMOS BAJARLO?


A muchos les aterra escuchar o leer la palabra “colesterol”, ya que consideran que se trata de algo dañino para la salud. Lo que no saben es que esta sustancia es realmente necesaria para que nuestro cuerpo funcione de la manera correcta, pues está implicada en la producción de algunas hormonas y ácidos digestivos, así como en el mantenimiento de distintas estructuras corporales.

Sin embargo, los problemas aparecen cuando mantenemos un nivel de colesterol alto en la sangre, algo que los médicos han denominado hipercolesterolemia y que se produce cuando existe un valor de colesterol malo (LDL) superior a 130mg/dl, o también por un nivel de colesterol bueno (HDL) inferior a 35 mg/dl.

En pocas palabras, tener un colesterol total por encima de los 200 mg/dl es una razón para preocuparse, ya que, de no prestarle la debida atención, puede desencadenar graves consecuencias y afectar enormemente nuestra salud. Por eso, aquí te dejamos algunos consejos para bajar el colesterol que te serán de gran ayuda.

Alimentación para bajar el colesterol

Los alimentos que consumimos afectan en gran medida nuestros niveles de colesterol, por lo tanto, debemos mantener una dieta saludable y muy balanceada, en la que se incluyan muchas frutas, verduras legumbres y cereales integrales.

Es importante eliminar los alimentos con un alto contenido de grasas, como los embutidos  y las frituras, al igual que los alimentos ricos en azúcares, como las galletas y la bollería.

Por otra parte, es recomendable controlar el consumo de carnes rojas (máximo 1 vez a la semana) y de huevos (menos de 6 unidades semanales).

Otras formas de bajar el colesterol

Aunque los cambios en la dieta ayudan muchísimo, para bajar el colesterol también es recomendable hacer ejercicio físico con frecuencia, alejarse del cigarrillo y reducir el consumo de bebidas alcohólicas.

De cualquier forma, si tienes un nivel de colesterol alto, no olvides consultar a tu especialista médico, a fin de obtener el debido diagnóstico y el tratamiento más adecuado que permita restablecer tales valores.